• OBRA SOCIAL DEL PERSONAL DE LA
    INDUSTRIA DE LA ALIMENTACIÓN

Existe un conjunto de elementos que pueden resultar nocivos para nuestro organismo si por accidente los ingerimos, respiramos o tocamos, y provocarnos una intoxicación.

Este riesgo aumenta con los más chicos, quienes por curiosidad natural suelen exponerse más fácilmente a sustancias peligrosas, como productos de limpieza, venenos, remedios, etc.

Por otra parte, la mala ventilación de un ambiente también puede provocar que respiremos sustancias que nos hacen daño. Una pérdida en la cocina o el calefactor a gas pueden provocar intoxicaciones severas por monóxido de carbono que pongan en riesgo nuestra vida.

¿Qué podés hacer?

Depende del modo en que la persona entró en contacto con el producto que lo intoxicó:

  • Si lo tocó: quitale la ropa de esa zona y lavala con abundante agua durante 15 o 20 minutos. Utilizá solo agua (no uses lociones, grasas o aceites).
  • Respiró gas por una pérdida en la cocina o el calefactor: llevá a la persona a un lugar abierto y bien ventilado. Después, cerrá la llave de gas y ventilá la habitación donde se produjo la intoxicación. Llevá inmediatamente a la persona a una guardia. Recordá no volver a usar el artefacto que pierde hasta que lo arreglen.
  • Si le salpicó en el ojo: con un paño o papel suave, retirá del rostro los restos del producto. Lavá el ojo con mucha agua fría de la canilla, dejá que corra el agua por el ojo unos 20 minutos. Fijate que no hayan quedado restos del producto en el ojo, pestañas y alrededores.
  • Si lo bebió o lo tragó: si la persona tiene dificultades para tragar, está como dormida o confundida, o está inconsciente, no la hagas vomitar ni beber nada. Llevala urgente a una guardia o llamá al Centro Nacional de Intoxicaciones, Hospital Posadas 0800-333-0160.
  • Si lo respiró: llevá a la persona a un lugar abierto y bien ventilado.
  • Si respiró gas por una pérdida en la cocina o el calefactor: llevá a la persona a un lugar abierto y bien ventilado. Después, cerrá la llave de gas y ventilá la habitación donde se produjo la intoxicación. Llevá inmediatamente a la persona a una guardia. Recordá no volver a usar el artefacto que pierde gas hasta que lo arreglen.

En todos los casos, después de seguir el procedimiento, llevá a la persona a la guardia del hospital.

Prevení intoxicaciones

  • Guardá los remedios y los productos de limpieza fuera del alcance de los chicos (en un mueble alto o bajo llave) y en su envase original. Etiquetá bien cada producto.
  • No guardes productos químicos en recipientes para alimentos, como botellas de bebidas, ya que luego pueden consumirse por error.
  • Si tenés encendido en un lugar cerrado un calefactor a gas, un calefón, la cocina o un brasero, dejá siempre un poco abierta la ventana o la puerta.
  • Fijate siempre que la llama del fuego en la cocina o el calefón sea de color azul.
  • Recordá que los calefones, termotanques, hornos y otros artefactos a gas del hogar deben ser instalados por profesionales matriculados. Nunca los instales en el baño.
  • Evitá automedicarte: el médico es la única persona que sabe decirte si tenés que tomar o no un remedio.
  • Antes de usar productos de limpieza, diluyentes de pintura o plaguicidas para uso doméstico y jardín, lee bien las instrucciones del envase. Pueden indicarte la necesidad de usar guantes de goma, mascarilla u otro tipo de protección.
  • No prendas el auto en un garaje cerrado.